LA SEGURIDAD DE MI INSEGURIDAD

sábado, 21 de marzo de 2015

Entonces se me ocurrió la idea de culminar con esto, (siempre se me ocurre buenas ideas), Aunque cause risa pensé en poder acabar con algo que nunca había tenido un inicio, sugiriéndole al corazón algo que tal vez nunca hubiera hecho caso, sugiriéndole que se olvide por completo de ti, que se olvide de la  persona que entre sueños juró amar y que ahora, por cosas del destino, siento que no está, siento que está más lejana que el Sol, más lejana que cualquier otro planeta, y todo por la simple y tonta idea que un día me hice a mí mismo y le hice creer, la idea de que en algún tiempo remoto (no pensaba que iba a ser tan distante) podría haber “pasado” algo entre los 2, la idea que no solo en sueños tu podías fijarte en mí, la idea que no solo me vieras como tu amigo. Y ahora sí lo entiendo, cosas vienen y cosas van, cosas que hacen que me dé cuenta que solo en mis sueños aquellos pasajes se quedaran, la realidad distante de ellos esta, y tú, por consiguiente, allí te quedaras.

Es una pena, pensé que de alguna forma lo nuestro iba funcionar (cual nuestro?), pero me di cuenta que NO, que tu mirabas hacia otro camino, y la seguridad de la cual tanto me jactaba de pronto se vio inmersa en un hoyo oscuro, en un hoyo llamado olvido, y es que eso tengo que hacer, ahogar mis ansias de quererte para lograr entenderte, ahogar mis ansias de sentirte cerca para extrañarte a lo lejos, extrañarte, quererte, sentirte, ¿qué más?, ¿qué más podría describir todo esto que siento?, ¿todo esto que juré nunca contar a nadie?, todo esto que lo guardaba en el baúl de la noche, en el baúl de tu recuerdo, un baúl cuya clave decía tu nombre, cuya clave era el sentirme querido por ti, un baúl que ahora tiré al mar, un baúl que me hizo olvidar.

Cada momento, cada instante, cada mirada, cada sonrisa, cada caricia, cada beso, cada risa, cada caminata, cada todo. Cada poesía que podría haberte compuesto, cada estrella que hubiera podido bajar en tu nombre, cada amanecer que hubiera levantado por ti, cada sentimiento que hubiera nacido en mí, por ti, cada frase que podría haber iluminado nuestro camino, cada historia que hubiera inventado para demostrarte día a día que mi cariño crece, en fin, cada pensamiento que ya no está, cada pensamiento que se esfumó afuera de mí, cada pensamiento que tuvo como tubo de escape la verdad, verdad maligna pero verdad al fin, verdad que no cambiaré, verdad que solo tú sabes, verdad que me dijiste cuando te fuiste, verdad que me hizo derrumbar la casa de mi estabilidad, verdad que me hizo caer, dar un respiro de inseguridad.

Pude sentir ahora que todo volvía a la normalidad, aunque no tan normal, aunque un poco extraña, normalidad a la cual podría acostumbrarme con un par de años de práctica, normalidad que no te tiene a ti como principal ilusión, normalidad que me hizo dejarte, normalidad que es mejor para los dos, normalidad que me juró un mundo mejor, y sin ti la verdad no lo creo. JC

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